La arquitectura del New Balance 530 responde a principios fundamentales de ingeniería biomecánica y ciencia de materiales. El upper multicapa combina fibras sintéticas de alta tenacidad con paneles de cuero procesado térmicamente, creando una matriz de ventilación que mantiene el microclima interno a temperatura óptima mientras proporciona soporte estructural direccional. El núcleo del sistema radica en la tecnología ABZORB: un compuesto viscoelástico de células cerradas que absorbe hasta un 40% más de energía de impacto que las espumas convencionales, redistribuyendo las fuerzas reactivas del suelo a través de toda la superficie plantar.
La suela exterior utiliza un compuesto de caucho con aditivos de carbono que incrementa la resistencia al desgaste abrasivo en un 300%, mientras que la geometría hexagonal del patrón de tracción optimiza el coeficiente de fricción en superficies variables. La construcción ultraligera se logra mediante el proceso de moldeo por inyección de gas nitrógeno, que reduce la densidad del material en un 35% sin comprometer la integridad estructural. Este enfoque sistémico de ingeniería resulta en un calzado que no solo minimiza el gasto energético durante la marcha, sino que maximiza la respuesta propulsiva en cada ciclo de pisada.